Curiosidades sobre los astros, propuestas de observaciones sencillas, aspectos cotidianos pero poco conocidos, todo ello con un enfoque didáctico.

lunes, 24 de febrero de 2025

La alineación planetaria: informaciones erróneas

 

Si te han dicho que a finales de febrero podrás ver en el cielo 7 planetas alineados, te han engañado.

Te han engañado porque verás solo 3 planetas. Que además se llevan viendo desde mediados de diciembre. O quizás sean 4 si tienes el horizonte oeste muy bajo y el cielo por allí muy limpio. Pero no más. 

¿Por una sola noche? mejor durante varios días anteriores al 28 ¿Quién se inventó lo del 28?

28-2-2025 Desde 40º latitud norte, 45 minutos tras la puesta de sol.
Distinguirás a Venus, Júpiter y Marte, con el aspecto de 3 estrellas muy brillantes.

Es cierto que da la casualidad de que todos los planetas están a la vez en el cielo al principio de la noche y a esto se refieren todas esas noticias, a veces mal redactadas o exageradas, pero ¿dónde están los otros? que, verse, verse, no se verán.

28-2-2025 Desde 40º latitud norte, 45 minutos tras la puesta de sol
Ahí están los otros 4 que faltaban

Pero…

 …. Urano y Neptuno no se ven nunca a simple vista. Los podrás ver si te los enseñan con un telescopio, pero de uno en uno, fuera del contexto del grupo. Desde luego, no se verán alineados con los otros, sino solitarios en el ocular.

Saturno y Mercurio estarán ya muy cerca del horizonte en cuanto el cielo empiece a oscurecer, y no los verás a no ser que tengas un horizonte oeste muy bajo y una buena vista, porque apenas se distinguirán. Mercurio quizás, pero Saturno seguro que no.

Y si te han dicho que debes aprovechar la oportunidad porque hasta dentro de más de 400 años no se volverá a ver algo parecido, pues te han vuelto a engañar y además de una manera exagerada.

¿A quién se le habrá ocurrido que hay que esperar a 2492 para ver algo parecido? A alguien que se equivocó pero a quien muchos, sin comprobarlo, han copiado. 

Es cierto que el 18 de abril de ese año ocurrirá algo similar:


Pero parece una tomadura de pelo el que ese año aparezca en muchas noticias, porque sin buscar mucho ya he encontrado otras dos ocasiones mucho más cercanas: 

El 1-12-2124 y fechas próximas con situación similar

Situación preciosa con 3 planetas juntitos, y además la Luna también colabora

Y el 25-5-2125


E incluso extraña el que aparezca ahora la noticia, porque en la Nochebuena de hace dos años también ocurrió: el 24-12-2022

El 24-12-2022 45 minutos después de la puesta de sol, los 7 planetas alineados y acompañados por la Luna

Y el 18-6-2022

El 18-6-2022 estaban así los planetas 45 minutos antes de la salida del Sol

O sea, que si es un fenómeno que ha vuelto a ocurrir al cabo de poco más de 2 años, (o incluso de 6 meses)...no será tan extraordinario


Otros aspectos menores

Y ya metidos en estos temas, siempre se cuela en las noticias algún detalle no muy exacto, aunque no tan absurdo como los anteriores:

- En estos casos mediáticos sobre temas astronómicos siempre se aconseja buscar algún lugar sin contaminación lumínica para observarlo. 

Ahora, estos días de final de febrero ¡puedes olvidarte de este consejo! La condición para intentar ver a los 5, es decir al escurridizo Mercurio y al casi imposible Saturno será tener un buen horizonte.  Como estos últimos solo podrán verse en el crepúsculo, no importa el tema de la contaminación lumínica porque cuando se enciendan las luces, éstos ya se habrán ido y los 3 más brillantes destacarán casi en cualquier cielo. Habrá que buscar un lugar con un horizonte oeste lo más bajo posible

- Aunque se insista tanto en el día 28 de febrero, son mucho mejores los días anteriores. Desde el 25 la posición del más difícil (Saturno) será mejor que el 28 para distinguirlo. Es cierto que el brillo de Mercurio va aumentando esos días, pero siendo mucho mayor que el de Saturno es éste el que hay que priorizar.

- Precisamente respecto a la posición del sexto planeta, se ha colado un error que condiciona toda la noticia:

Pues no.  Saturno no estará alto en el cielo, sino el más bajo de todos, y con seguridad el de más difícil observación. Puede ser un despiste sin más, pero que favorece la tesis errónea de la noticia.

-También se han dado fechas erróneas en otras noticias al respecto:

“una gran alineación de siete planetas a principios de 2025, un evento raro desde 2010”

Pues resulta que en 2010 no se produjo ninguna situación similar a la de ahora (faltaba Mercurio), pero sí en 2022 como se ha indicado.

- Lo de la “alineación” se refiere simplemente a que están todos visibles en el cielo, y sobra ese término porque induce erróneamente a pensar en una línea recta. Como todas las órbitas están situados en planos casi paralelos, siempre que están en el cielo los veremos como en una línea ligeramente curvada. 

El término "alineación" es absurdo. Bastaría con decir que se pueden ver simultáneamente.

Para comprobar que todos los planetas sean visibles de noche (al principio o al final de la misma), en una representación en planta se puede trazar una línea recta que pase por la Tierra y el Sol, y si todos los planetas quedan en el mismo lado, se verán simultáneamente. Si en ese orden quedan a la izquierda se verán al principio de la noche, una vez puesto el Sol, y si están a la derecha se verán antes de que salga el Sol. Por supuesto, si un planeta queda angularmente cercano al Sol podría quedar oculto con la luminosidad del crepúsculo.

Como todos los planetas quedan en la parte superior de la línea roja serán visibles  simultáneamente al principio de la noche

No hay que confundir lo que ahora se llama erróneamente "alineación" con "conjunción planetaria" que es cuando aparecen muy cercanos entre sí vistos desde la Tierra, por perspectiva. Y sería cuando están más o menos alineados visto el Sistema Solar en planta: vistos desde arriba, con la Tierra en un extremo de una línea recta que pasa aproximadamente por los planetas que estén en conjunción.
Situación de los planetas en sus órbitas en la conjunción planetaria para dentro de 15 años

Ese espectáculo es mucho más llamativo que la alineación y ocurrirá por ejemplo el 7-9-2040 con el agrupamiento de los 5 planetas brillantes y la Luna, siendo mucho más fácil de ver desde el hemisferio sur:

Conjunción planetaria el 7-9-2040 con referencia al horizonte de ambos hemisferios


Después de todos los anuncios y lo que hayas podido ver, seguramente te habrá decepcionado el tema de los planetas y sus posiciones. Pero precisamente ahora, con la aparición del esquivo Mercurio, comienza a mi modo de ver un capítulo muy interesante. Espero escribir pronto sobre ello.

martes, 18 de febrero de 2025

Saturno esconde su anillo

 

Sin duda, Saturno es el planeta más fotogénico del Sistema Solar. Su espectacular anillo, visible con cualquier telescopio, es un adorno inconfundible. Aunque la imagen que nos muestra no siempre es igual:

Debido a la inclinación del plano de su órbita y sobre todo de su eje de rotación, la imagen del sexto planeta varía. A la izquierda con los anillos casi de perfil y enseñándonos la cara norte de los mismos, y a la derecha muy abiertos y mostrando la cara sur

En unas semanas ocurrirá algo curioso porque se verá totalmente diferente. Estos días desde aquí el anillo se va poniendo cada vez más de perfil y como en realidad es muy estrecho (con un espesor estimado de alrededor de solo un kilómetro frente a los  282000 kilómetros de diámetro), cada vez es más difícil apreciarlo hasta que el 23 de marzo el anillo se hará invisible por estar de canto.

Es solo una cuestión de geometría y punto de vista, y luego volverá a recuperar su imagen habitual, pero mientras y durante unas semanas se ve como una estrecha línea e incluso desaparecerá totalmente de nuestra vista.

Si en la fecha adecuada orientamos el telescopio para ver esa "estrellita" que alguien nos dice que es Saturno, a primera vista seremos incapaces de reconocer a ese planeta tan raro. Un disco apreciable, posiblemente alguna banda no muy contrastada, pero lo primero que nos venga a la cabeza, Júpiter, debería verse más grande y muy evidentes sus principales satélites.  Pues no; se trata del planeta más presumido pero que ese día sorprendentemente no nos muestra sus anillos.

Una imagen de Saturno sin anillos

El descubridor de los anillos de Saturno fue Galileo Galilei en 1610. Su primitivo telescopio no le permitió apreciar la forma exacta del anillo y creyó ver dos satélites, como los que había descubierto en Júpiter, uno a cada lado, pero que a diferencia de los del planeta gigante estos eran mucho más grandes y no cambiaban de posición.

Galileo, la primera persona que utilizó un telescopio para observar los astros, y por tanto quien pudo descubrir la "rareza" de Saturno

Debido a lo extraño de su hallazgo, se lo comunicó a su mecenas en clave, para que cuando alguien más lo viera quedara constancia de que él había sido el primero.

Pero su perplejidad debió aumentar cuando 2 años más tarde observando nuevamente Saturno, no vio ni rastro de su extraña compañía.

Al igual que está a punto de ocurrir dentro de poco, tal como se ha dicho el 23 de marzo, también en julio de 1612  los anillos estaban de canto y era imposible verlos.

Si el eje de giro de Saturno (que es el mismo que el de sus anillos) fuese perpendicular al plano de su órbita, y ésta estuviera en el plano de la eclíptica (de la órbita terrestre) tendríamos los anillos siempre de canto y Galileo no habría visto nada extraño en el sexto planeta. Pero la realidad es que el eje está inclinado casi 27º y por ello, según la posición de Saturno en su órbita vemos los anillos desde diferentes ángulos, y en determinadas circunstancias justo de canto.

Imágenes visibles desde el centro de la órbita, en una primera aproximación. La órbita de Saturno, que es casi circular, se ha trazado en perspectiva y por eso queda muy elíptica.

Situación general

En realidad la visión desde la Tierra puede variar ligeramente. Su órbita respecto a la de Saturno es mucho más pequeña, a su escala se situaría siempre muy cerca del Sol, pero aunque hay otros dos factores menores que influyen en el ángulo bajo el que vemos los anillos, simplificando la situación se puede decir que como el año de Saturno es de casi 30 años terrestres (29.45), aproximadamente cada 15 años los anillos serían inapreciables en las posiciones A y C. Así ocurrió en 2009 (posición A) y desde entonces hemos visto la cara norte de los mismos. El próximo 23 de marzo se pondrán de canto (en C) y hasta 2038 (nuevamente en A) se verá la cara sur.

Como se puede deducir de las fechas dadas, en realidad debido a la excentricidad de la órbita de Saturno, la duración de los periodos en que se ve cada una de las caras no son iguales, siendo alternativamente de 13.7 años durante los que se ve la cara sur y 15.7 en que se ve la cara norte.

La decepción

Pero si llevamos esperando 15 años para ver a Saturno sin anillos, la mala suerte nos lo va a impedir al menos desde el hemisferio norte aunque habrá una segunda oportunidad de consolación: 

El Sol nos quitará el espectáculo ya que ahora, cuando ya falta poco, el planeta se acerca angularmente al Sol, pasará tras él, y el día clave, el 23 de marzo, aunque ya se ha colocado al otro lado (10º de elongación oeste) y teóricamente visible por la mañana, no será suficiente para observarlo desde el hemisferio norte. Quizás sí desde el hemisferio sur donde la eclíptica al amanecer en esta época del año está más vertical.

Por valorar la posibilidad de observarlo se ha añadido en el gráfico una situación similar vespertina. Tendrá esa misma elongación pero por la tarde el día 28 de febrero, cuando la anunciada alineación planetaria sobre la que escribiré en breve. Aunque la diferente inclinación de la eclíptica hace que en el hemisferio sur sea el 22 de febrero y en el norte el 8 de marzo, cuando la altura sea similar a la fecha del anillo de perfil.

El consuelo

De todas formas, como consecuencia de lo que explico luego, habrá una segunda oportunidad en noviembre. No estará exactamente de canto pero casi. El asunto es que cuando ya se empiece a ver bien de madrugada (ya el plano sur del anillo) el ángulo irá aumentando hasta el mes de julio pero luego, como si se hubiera arrepentido,  empezará a disminuir nuevamente y a finales de noviembre parecerá que va a ponerse nuevamente de perfil e incluso podrá costar ver el anillo, pero poco antes retrocederá, aumentando el ángulo:


En algunos casos, como en 2038-39, sí llega a ponerse de perfil una segunda vez, y necesariamente una tercera para dejar visible la cara distinta (norte o sur) que antes del inicio del proceso.

 

Entrando en detalles

Las imágenes inferiores del gráfico de la situación general corresponderían a la visión desde la posición del Sol y cambian muy poco respecto a lo que vemos desde la Tierra. No obstante, y a pesar de que la órbita de la Tierra es muy pequeña comparada con la de Saturno y a esa escala se separa muy poco del Sol la mecánica es un poco más complicada al considerar por una parte el paralaje debido a la posición de la Tierra en su órbita, y por otra el ángulo que forma la eclíptica con el plano de la órbita de Saturno (2.8º)

Debido a estos dos factores todos los años hay un cierto cabeceo o variación del ángulo con el que vemos los anillos de Saturno, unos meses aumentando, otros disminuyendo, independientemente de su variación lenta y uniforme respecto al Sol con su ciclo de 29.45 años. 

Esta variación mensual es pequeña, pero cuando los anillos están casi de perfil puede ser suficiente para fisgarle la otra cara y añadir otras dos ocasiones en que estén de canto.

Tomando el comienzo de 2022, la primera parte del año el anillo e estrecha y en la segunda parte vuelve a anchar pero no tanto como al principio porque el proceso va hacia la posición de perfil en 2025.

Pero al acercarse el momento en que el anillo esté de canto, la situaciones son más variadas:

El tamaño de la órbita de la Tierra se ha exagerado para una mejor visualización. También por ese motivo se ha utilizado un gráfico en planta y no en perspectiva que quedaría más estético.

En el ejemplo del gráfico, si Saturno estuviera en A desde el Sol se vería de canto, pero si en ese momento la Tierra estuviera en P desde aquí se vería el plano Sur de los anillos. Pero si en ese mismo momento la Tierra estuviera en Q, se vería el plano norte. Desde R y S también de canto.

Pero teniendo en cuenta la inclinación de la órbita de Saturno, si el punto A está por debajo del plano orbital de la Tierra, tanto desde R como desde S se vería el plano norte. También desde Q, y desde P depende de la influencia de cada factor.

Si Saturno estuviera en B, desde cualquier posición de la Tierra se vería la cara norte.

Debido a estas circunstancias, ahora estamos viendo la cara norte hasta el 23 de marzo en que estarían de canto. A partir de este momento se verá la cara sur bajo un ángulo cada vez mayor, pero en C se reduce el ángulo y casi llega a ponerse nuevamente de perfil pero por muy poco no ocurre e irá aumentando el ángulo hasta que ya en 2038, esta vez si, volverá la norte. Todo esto se intenta representar en este gráfico:


En el fenómeno de 2038-39 en realidad habrá 3 momentos en que se pondrá de perfil: el 15-10-2038 de la cara sur a la norte, el 1-4-2039 de la norte a la sur, y el 9-7-2039 de la sur a la norte.

Esta curiosa circunstancia de tres momentos en que Saturno esconde su anillo se produce casi tanto como la otra (un solo cambio como la actual) aunque no siempre ocurren de manera alternativa.

NOTA: Como en un gráfico en planta es difícil representar una imagen de Saturno donde quede claro qué cara se verá desde un lugar determinado (excepto en algunos casos evidentes) se indica la dirección desde la que se ve de perfil. En un gráfico en planta esa dirección (línea azul) se mantiene de manera paralela y deja clara cada situación: según el sentido de la inclinación desde la Tierra hasta Saturno (flechas blancas). 

Como esto puede resultar algo confuso, si encuentro otra manera de representarlo la incluiré.