En diciembre de 2020 se produjo una extraordinaria conjunción de Júpiter con Saturno. Ambos planetas aparecieron en el cielo muy cercanos entre sí, separados solo por 6´. El 1 de mayo de 2022 podrá verse otra conjunción destacable, esta vez entre entre Venus y Júpiter.
La conjunción de Júpiter y Saturno el 21-12-2020 |
Aunque no se aproximarán tanto y ocurre más frecuentemente, a simple vista será incluso mucho más llamativa que aquella porque el brillo de Venus es mucho mayor que el de Saturno.
También podrán verse los dos
planetas simultáneamente en el ocular de un telescopio apreciando los satélites
de Júpiter y la fase de Venus. La única pega es que se verá de madrugada,
cuando seguro que tiene muchos menos espectadores.
Desde Norteamérica la situación
será parecida a la de Madrid, aunque Venus y Júpiter estarán un poco más
separados, e incluso el día anterior (30-4) se verán más próximos.
Realmente la máxima aproximación, con una separación de menos de 14’ se produce el 30 de
abril a las 21h T.U., momento en que solo son visibles desde zonas de Asia y
Oceanía. Cuando aparezcan por el horizonte en lugares de la península Ibérica,
ya el día 1 de mayo hacia las 6 de la madrugada (4h T.U.), podrán verse con una
separación de poco más de 21´, o alrededor de 30´ desde América 4 o 5 horas más
tarde, según el lugar.
Ambos planetas y los satélites de Júpiter simultáneamente en el ocular de un telescopio si no tiene demasiada focal, desde Madrid. |
Desde Buenos Aires |
Aunque mucho menos destacadas, a lo largo del curso se producen unas cuantas conjunciones más entre los 5 planetas visibles sin ayuda óptca.
Ilustro con un gráfico cada una de
ellas, correspondiente a la situación desde Madrid (excepto una, desde Buenos Aires). Como casualmente todas
ocurren en primavera o fechas próximas y de madrugada, desde el hemisferio sur se verán mucho mejor, saliendo bastante antes respecto al Sol, tal como ocurre en
la anteriormente mencionada conjunción del 1 de mayo, porque ahí la eclíptica de
madrugada está más vertical en esa estación
- Venus y Marte tienen dos
conjunciones con solo un mes de diferencia:
El 13 de febrero una conjunción
muy separada, que forma un triángulo isósceles con Mercurio
Y nuevamente el 12 de marzo. Curiosamente, después de haberse colocado Venus más al oeste que Marte, vuelven a coincidir un mes después en una conjunción ligeramente más cercana, y donde Saturno hace el mismo papel que hizo Mercurio en el triángulo isósceles
- El 2 de marzo Mercurio y Saturno. La situación anterior se produce porque el planeta anillado le toma el relevo a Mercurio, sobrepasando su posición en una conjunción muy cerrada, pero que desde el hemisferio norte será difícil de ver. No así desde el Sur, y por ello pongo el gráfico que corresponde a Buenos Aires
- El 28 de marzo Venus y Saturno,
aunque no estarán excesivamente cercanos, tendrán la compañía de Marte,
formando un curioso triángulo.
- El 5 de abril Marte y Saturno estarán en conjunción bastante cerrada, con una separación de menos de 20´ y con brillo similar, teniendo ambos una magnitud cercana a 1 y estarán próximos a Venus, mucho más brillante con magnitud -4 y que en un primer vistazo nos ayudará a encontrar la zona.
En los días próximos los movimientos propios de los 3 planetas producirán diferentes configuraciones.
- El 29 de mayo Marte y Júpiter también aparecerán bastante próximos, con una separación de poco más de 30´, escoltados a bastante distancia por Venus y Saturno.
Además hay otras 4 conjunciones
en las que interviene Mercurio, que prácticamente son inobservables por la
pequeña elongación (cercanía al Sol). Dos con Marte el 9 de octubre y el 10 de
noviembre, una con Venus el 21 de diciembre, otra Saturno el 2 de marzo y otra
con Júpiter el 21 de marzo.
El que se produzca una conjunción de dos planetas significa que los vemos desde la Tierra casi en el mismo punto (con la misma coordenada de ascensión recta), pero no tiene nada que ver con el hecho de que estén alineados desde el Sol, como a veces se suele confundir.
En el gráfico A desde la Tierra se ve a Venus y Marte en conjunción, pero el Sol no está en esa misma línea. Por supuesto, podría ocurrir que sí estuvieran alineados también con el Sol, como en el gráfico B, pero es muy infrecuente. E incluso puede ocurrir, cuando interviene un planeta interior, que estén en línea con el Sol, pero desde la Tierra aparecerían en lugares opuestos, como en C, pero en este caso Venus estaría en conjunción con el Sol y Marte en oposición.
- Frecuencia de las conjunciones
Debido a que los dos planetas
interiores (Mercurio y Venus) están en las cercanías del Sol y tanto Júpiter
como Saturno tienen casi todos los años su conjunción con el astro rey, normalmente
también llegarán a estar en conjunción con dichos planetas interiores. Pero la
mayoría de las conjunciones de Mercurio y alguna de las de Venus no serán
visibles por ocurrir angularmente cerca del Sol.
Marte está en conjunción con el Sol cada poco más de dos
años (periodo sinódico), y también con Júpiter y Saturno,
que de un año a otro se desplazan muy poco respecto a las constelaciones. Este
curso sí toca, y el planeta rojo tiene conjunciones con los otros 4, pero el
próximo no tendrá ninguna.
Precisamente eso último suele ocurrir cuando está en oposición, cuando más brilla. Parece que cuando se pone el traje de gala no quiere compartir el protagonismo con nadie, aunque en ocasiones haga alguna excepción con otro de los planetas exteriores.
Durante un año, en torno a su oposición, Marte no puede tener conjunciones con Venus ni con Mercurio |
El caso más infrecuente, pero más
regular, es el de Júpiter con Saturno, que debido a su lento desplazamiento
solo se les verá en conjunción cada 20 años.
- Separación aparente entre los dos planetas
Los dos planetas que están en
conjunción no se ven en el mismo punto, sino que prácticamente siempre hay una
cierta separación entre ellos (tienen la misma coordenada de ascensión recta
pero diferente declinación). Esto es porque las órbitas de los diferentes
planetas no están en un mismo plano, y los nodos no coinciden. Las
inclinaciones orbitales respecto a la eclíptica son:
Mercurio 7º, Venus 3.4º, Marte 1.85º Júpiter 1.3º y Saturno 2.48
Según la fecha en que se produzca
la conjunción (que determina la oposición de la Tierra en su órbita) y el lugar
(la ascensión recta de los planetas) esa separación es diferente, y como
ejemplo tenemos este curso las dos conjunciones entre Venus y Marte, la primera
más separados que la segunda.
En ocasiones una conjunción se produce cuando un planeta de movimiento aparente más rápido adelanta a otro más lento. Pero otras veces ocurre por una retrogradación y en ese caso suelen repetirse las conjunciones. Es curiosa la situación de las dos conjunciones de Marte y Venus. Cuando el primero adelanta al segundo éste ya no está retrogradando pero recién acabada esta retrogradación, se mueve ya en sentido directo pero muy lento, de manera que cuando aumente esa velocidad volverá a recuperar la delantera, adelantando a Marte, como un coche que es adelantado, se pica y vuelve a ponerse delante.
Incluso pueden producirse 3 conjunciones seguidas, con diferente separación, como ocurrió con Júpiter y Saturno en el año 6 A.C., que recoge el siguiente gráfico:
En el caso de las conjunciones de Júpiter y Saturno, al estar lejos la separación no depende apenas de la posición de la Tierra, y se puede establecer una zona donde las conjunciones serán próximas, según se recogió el año pasado, y se ilustraba con estos dos gráficos que copio de allí.
Gráfico esquemático en perspectiva de las órbitas de Júpiter y Saturno, en el que se ha exagerado la inclinación de las órbitas (en rojo los valores reales), para entender la situación. |
En el caso de los otros 3 planetas, mucho más cercanos, hay que considerar también la posición de la Tierra, ya que el ángulo de inclinación de su órbita es tomando vértice en el Sol, y desde la Tierra será diferente. Por eso la mayoría de las conjunciones de Venus en este curso son muy abiertas, ya que ocurren cuando está bastante por encima de la eclíptica y además muy cerca de la Tierra: En la primera de ellas lo vemos 6º por encima de la eclíptica aunque la inclinación de su órbita es de solo 3.4º.
Buenas tardes y muchas gracias por su interesantísima entrada. Le escribo porque me surge una duda: siempre me he preguntado el motivo por el que cuando un planeta retrograda visto desde la Tierra lo hace trazando esa especie de lazo y no sobre una línea recta como cuando avanza "normalmente". Es decir, es como si el planeta "subiera" y luego "bajara" para trazar un lazo. Imagino que el que los planetas orbiten en planos diferentes influye en todo esto pero no me queda del todo claro. Muchas gracias :-)
ResponderEliminarGracias. Efectivamente, Pablo José. Debido a la inclinación orbital de un planeta no lo vemos moverse en la eclíptica, pero tampoco paralelo a ella. Por ejemplo en el caso del gráfico de las trayectorias de Venus y Marte, Venus va acercándose a la eclíptica. Si en ese tramo retrogradase haría una especie de Z invertida. Pero si la retrogradación ocurre cuando el planeta está en la parte más alta o más baja de su órbita (a 90º del nodo) formaría un lazo cerrado.
EliminarPor ejemplo si empieza a retrogradar cuando se está alejando de la eclíptica hacia el norte pero acaba cuando se está acerando a ella hacia el Sur, formaría un lazo como los típicos lazos negros, o de otros colores reivindicativos.
Ahora comprendo. Gracias por su respuesta. Un cordial saludo
ResponderEliminarHe pensado que voy a escribir un artículo sobre este tema de la retrogradación y el movimiento aparente. Quizás lo publique cuando alguno de los planetas esté retrogradando. Gracias por la idea.
ResponderEliminarSí por favor.
EliminarYa lo estoy preparando. En un par de días o tres espero publicarlo.
EliminarMuchas gracias, será un placer leerlo porque he consultado en muchos libros de astronomía pero en todos explican el fenómeno de la retrogradación planetaria como un movimiento aparente pero no explican la causa de que los planetas dibujen esas formas concretas vistas desde la Tierra.
ResponderEliminar