Ya
se acerca el fenómeno celeste más conocido y más esperado por el público en
general: la lluvia de estrellas fugaces Perseidas o “Las lágrimas de San
Lorenzo” como popularmente se conocen en muchos lugares; y ya mucha gente va
preguntando cuándo y cómo se verán este año.
En realidad esta lluvia es muy amplia en el tiempo y ya han empezado a verse algunas Perseidas dispersas, pero como en realidad la pregunta suele ser sobre el momento en que más se verán, la respuesta es la madrugada del día 13 de agosto. Y si
no hay nubes, merecerá la pena poner el despertador, porque hay algo más.
Es posible que hayas oído que en 2019 las condiciones no van a ser las más adecuadas para la observación de esta lluvia porque la Luna casi llena molestará, y que por ello se verán muchas menos que en otras ocasiones.
Aquí un ejemplo, el primero que me ha dado Google:
Se
puede leer eso mismo “de que si la Luna…” en casi todas las informaciones sobre las Perseidas de este año, pero … No hagas mucho caso.
No hagas caso, a no ser que seas de esos comodones
que quieren verlas antes de irse a la cama y les cuesta madrugar. Porque las
circunstancias, tanto las favorables como las aparentemente desfavorables, se
unen para que podamos ver más meteoros (nombre técnico que se da a las estrellas
fugaces) que en otros años, pero solo de
madrugada.
El máximo de las Perseidas, el día 13, se produce con la Luna Creciente, algo más de 2 días antes de la Llena, por lo que se ocultará antes del alba, dejándonos un margen suficiente de tiempo con el cielo oscuro.
Todas las opiniones deben ser valoradas, pero yo no estoy de acuerdo con estos titulares aunque algunos tienen su lógica, y creo que el último contiene 3 errores. |
El máximo de las Perseidas, el día 13, se produce con la Luna Creciente, algo más de 2 días antes de la Llena, por lo que se ocultará antes del alba, dejándonos un margen suficiente de tiempo con el cielo oscuro.
Además puedes aprovechar ese momento para observar otros dos interesantes fenómenos celestes.
La
Luna nos obligará a elegir precisamente la hora en general más favorable aunque
habitualmente poca gente observa entonces, y que casualmente este año es muy
posible que además en esos momentos (de la última parte de la noche en el Oeste de Europa), se produzca la
máxima actividad absoluta.
- Efectivamente,
la Luna creciente y casi llena molestará toda la noche del día 12 al 13 de
agosto hasta que se ponga, en la España peninsular sobre las 4:30 (2:30 T.U.).
Si queremos ver algo, deberemos mirar al cielo de madrugada, tal como he recalcado.
- Pero
aparte de que la Luna nos obligue a ello, en general esas son las mejores horas
todos los años porque es cuando la Tierra se mueve “hacia arriba” según la
posición del observador, y atrapa un mayor número de partículas que se
convertirán en estrellas fugaces, como expliqué en el anexo del post “las estrellas fugaces son para el verano” de 2018, y que se puede visualizar en este gráfico que ya he utilizado varias veces:
La situación geométrica hace que siempre de madrugada caigan más meteoros. La explicación detallada se puede ver clicando en el enlace mencionado antes, en su anexo. |
- Precisamente
en 2019 está previsto el máximo anual en un intervalo que incluye esas horas: La máxima actividad de la lluvia se
espera que tenga lugar entre las 4 y las 17 horas del día 13 (horas oficiales
en España).
- Por
si fuera poca coincidencia, además, tal como recoge el experto en estos temas
Mark Kidger en el último número la revista ASTRONOMIA, sobre esa hora (2 T.U.)
está previsto que la Tierra atraviese un filamento de meteoroides especialmente
denso, independiente del máximo habitual (circunstancia que se explica en los anexos de “El espectáculo de todos los veranos ya está aquí”). Como los cálculos sobre los filamentos no suelen ser excesivamente
exactos por su complejidad, si se retrasase solo un poco sería ideal.
Aunque
no es imprescindible, sería conveniente buscar un lugar con el horizonte Oeste
bastante alto que ocultaría la Luna antes y nos proporcionaría una pantalla
protectora contra su luz molesta, y observar de 4:30 a 6 (2:30 a 4 T.U.) porque
contra todo lo que se ha dicho, las condiciones serán ideales.
De acuerdo que el intervalo de tiempo no es grande, pero gracias a que en verano la luna llena (y fases próximas) se ponen antes de lo habitual por estar aproximadamente en la zona que se sitúa el Sol en invierno, será más que suficiente para la inmensa mayoría de la gente que solo pretende ver el espectáculo, y podrá cumplir con la tradición pidiendo unos cuantos deseos.
De acuerdo que el intervalo de tiempo no es grande, pero gracias a que en verano la luna llena (y fases próximas) se ponen antes de lo habitual por estar aproximadamente en la zona que se sitúa el Sol en invierno, será más que suficiente para la inmensa mayoría de la gente que solo pretende ver el espectáculo, y podrá cumplir con la tradición pidiendo unos cuantos deseos.
Para
casi todos quienes hayan observado otros años (normalmente se hace al principio
de la noche) será una sensación diferente. Por supuesto, habrá meteoros que
crucen una gran zona de cielo, pero por estar el radiante muy alto, a la
mayoría se les verá “caer” en vertical hacia el horizonte por cualquier zona de
éste, y no se verá ninguna perseida moviéndose con “trayectoria horizontal”,
como suelen aparecer frecuentemente las primeras horas de la noche.
Haz
una prueba cuando empiece a clarear, al menos durante un rato que además puede
servirte para descansar el cuello: no hace falta que levantes mucho la cabeza,
y fíjate en una zona del cielo próxima
al horizonte. En principio puede ser en cualquier dirección, pero mejor al
Oeste que todavía estará oscuro. Seguro que pillas algunas perseidas diferentes
de las habituales.
Sobre una imagen real del final de la noche, se han dibujado trazos similares a los que dejarían las perseidas a esas horas. |
Y
si las estrellas fugaces no te parecen suficiente motivo para el madrugón, además
habrá otros dos objetivos: el planeta Mercurio y la brillante estrella Sirio,
que precisamente esa noche serán especialmente interesantes. Para ello deberías
estar en un lugar con el horizonte Este lo más bajo posible (ahora sí es casi imprescindible),
porque por allí aparecerán ambos cuando ya por esa zona empiece a clarear.
El esquivo Mercurio
Por
su cercanía al Sol, el planeta Mercurio solo se puede observar en contadas
ocasiones, y con dificultad, bien en el crepúsculo matutino o vespertino.
Justamente el 13 de agosto de 2019 es prácticamente el mejor día del año para verlo por la madrugada desde el hemisferio Norte, y para
ello hay que mirar por el horizonte Este-Nordeste.
Aunque su máxima elongación (máxima separación angular respecto al Sol, visto desde aquí) es el día 10 (a las 22:58 T.U. del día 9) las mejores condiciones se darán precisamente en la madrugada del día 13 con un mayor brillo (-0.47 frente a -0.06) y un poquito más alto sobre el horizonte (6º 14´frente a 6º 04´ ambos con el Sol a -10º)
En esta imagen tomada en agosto de 2014 Mercurio apenas se intuye como un débil punto en la zona inferior izquierda del cielo, en el que destacaban la Luna menguante y Venus. |
Aunque su máxima elongación (máxima separación angular respecto al Sol, visto desde aquí) es el día 10 (a las 22:58 T.U. del día 9) las mejores condiciones se darán precisamente en la madrugada del día 13 con un mayor brillo (-0.47 frente a -0.06) y un poquito más alto sobre el horizonte (6º 14´frente a 6º 04´ ambos con el Sol a -10º)
La mejor posición unos días después de la máxima elongación es porque vamos hacia el Otoño, cuando a igual elongación la altura de Mercurio será mayor, como expliqué en este artículo.
El progresivo aumento de brillo es porque la fase de Mercurio va aumentando como ocurre en todas las apariciones matutinas.
Pero
cuando consigas ver al esquivo Mercurio (quizás sea la primera vez que lo hagas
de manera que figuradamente despertarías la envidia de Copérnico que nunca lo
pudo ver) no abandones el lugar porque hay más:
La estrella Sirio
Estos
días se produce además (en latitudes medias alrededor de 40º N) el fenómeno del “orto helíaco de Sirio”. Puedes
imaginar que eres uno de los vigías del antiguo Egipto que, en los días en que
se suponían próximas a producirse a las inundaciones del Nilo, oteaban el
horizonte al alba intentando ver a Sirio por primera vez
en varios meses. La estrella más brillante del cielo, que aparecía por primera
vez de madrugada, cuando las demás ya se habían apagado y anunciaba las
fertilizadoras inundaciones fue divinizada por este motivo.
Aunque
en estos miles de años que han pasado después de la época de los faraones las
fechas han cambiado por el movimiento de
precesión de los equinoccios, y en cada latitud es diferente, en una amplia zona central de la península Ibérica ocurre precisamente el 13 de agosto. En Andalucía casi una semana antes, pero si vives por ahí y lo ves este año, para tí será "tu" orto helíaco de Sirio porque probablemente nunca lo viste antes.
La estrella Sirio, el primer día que yo pude verla del verano de 2015, concretamente el 14-8. |
Instrucciones concretas:
En
resumen, y como consejo práctico, si la noche del 12 al 13 de agosto no hay muchas nubes, este año hay dos opciones aunque en realidad son dos variantes de una misma, pero cada cual puede elegir.
Antes de nada, los días previos busca un lugar con el horizonte Este muy bajo. ¿Que en la zona del Oeste es alto? pues mucho mejor.
a)
Pon el despertador a las 4, coge ropa de abrigo, una manta o esterilla para
tumbarte en el suelo y algo para comer, y dirígete cuanto antes a un lugar
oscuro, elegido con anterioridad. Si tu punto de observación está lejos, ten en cuenta el tiempo que
vayas a tardar en llegar y madruga algo más. Si cuando
llegues no encuentras a los colegas con quienes habías quedado, no es que te
hayas confundido de lugar, sino que seguramente se han quedado durmiendo y todos
los deseos serán para ti.
b)
Si esa noche tienes pensado acudir a una de las numerosas fiestas que se
celebran en muchos lugares por estas fechas veraniegas hasta altas horas, no
bebas demasiado, y a eso de las 4 deja a tus amigos que se aburran con las
últimas actuaciones musicales sin tu presencia y dirígete a un lugar oscuro. Bueno,
si vas acompañado, mejor; pero no olvides que debes permanecer todo el tiempo mirando
hacia arriba.
Observación de las Perseidas de 2016 |
Aunque frecuentemente aproveche la crítica a noticias con las que no estoy de acuerdo, no pretendo sacar faltas a nadie (todos las tenemos), pero sí aclarar situaciones interesantes y en este caso motivar al personal a observar, porque quizás se había desanimado debido precisamente a las informaciones aparecidas, no muy afortunadas. Además el tono “familiar” que a veces utilizo no intenta menospreciar sino hacerse cercano al lector.
Si escribiese lo mismo que los demás, y de la misma manera, este blog sobraría.
Por otra parte, hay que aclarar que los datos concretos que aparecen corresponden a la Península Ibérica. Esta lluvia de las Perseidas es especialmente interesante en el hemisferio Norte por la situación geométrica y la estación, pero prometo publicar algo de cara al verano austral sobre otras lluvias de meteoros, no menos interesantes.
----------------------------------------------------------------------------------------------
Actualización el 13-8-19:
Los resultados de mi observación: Todo lo anterior pero ahora con datos reales
No hay comentarios:
Publicar un comentario